imagen de un universo explicable mediante leyes, como un gran reloj, y predecible en sus procesos (Determinismo). Además, este universo deberá ser infinito, de lo contrario, todo su sistema gravitacional se colapsaría. Este universo, en su grandeza, sitúa al hombre en un papel secundario. Si el universo no posee finalidad, ¿la tiene la existencia del ser humano? Dios es el gran relojero que pone en marcha todo el sistema (mecanismo) y, una vez hecho esto, su papel deja de tener relevancia. El paradigma newtoniano- con un universo creado e infinito- no supone un ateísmo, pero sí dará camino al agnosticismo.