Upgrade to Pro — share decks privately, control downloads, hide ads and more …

Wassyla Tamzali

Wassyla Tamzali

La Vanguardia, 27 de mayo de 2012

cristinaltea

May 31, 2012
Tweet

Other Decks in Education

Transcript

  1. 16 LA VANGUARDIA I N T E R N A

    C I O N A L DOMINGO, 27 MAYO 2012 TEHERÁN wIrán sigue aumen- tando su producción de ura- nio enriquecido y ha alcanza- do niveles de pureza superio- res a los declarados hasta ahora, según el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) en Viena, desafiando así las resolucio- nes de la ONU. La produc- ción sería suficiente para fabricar al menos cinco ar- mas nucleares. Esta misma semana se reunieron en Bag- dad seis potencies mundiales para convencer a Irán de que frene su producción pero sin conseguirlo. Se volverán a reunir en Moscú el próximo mes. / Agencias Iránaumentala producciónde uranioenriquecido YEMEN wAl menos 62 miem- bros de Al Qaeda y tres solda- dos del ejército yemení mu- rieron ayer en un ataque de las tropas gubernamentales contra el grupo terrorista en la ciudad de Zinyibar, en el sur del país. Este ataque se produce después de que más de 83 soldados y policías mu- rieran el pasado lunes en un atentado perpetrado por Al Qaeda en Saná, en los ensa- yos de un desfile con motivo del 22 aniversario de la unifi- cación del país. / Efe ISABEL RAMOS RIOJA Barcelona Hija de un argelino de origen otoma- no y una valencia- na que se hizo musulmana al fi- nal de su vida para poder ser ente- rrada junto a su marido, Wassyla Tamzali vivió desde diferentes posiciones, a veces contrapues- tas, la guerra de liberación argeli- na, la ilusión de construir un país libre, el exilio voluntario y el re- torno a su país después de haber trabajado durante veinte años por los derechos humanos desde la Unesco. Esta abogada y femi- nista recoge sus vivencias en Mi tierra argelina (Saga, 2012). El FLN se ha confirmado en el poder en las legislativas, de- jando muy lejos a los islamistas. Es una calamidad. Argelia parece condenada a repetir su historia. Esto tranquiliza a algunos argeli- nos que temen más que nada el desencadenamiento islamista, o que el poder los ponga al mando aparente del país. Viendo su recorrido vital, ¿qué ha pasado en Argelia para que un país en el que las muje- res habían luchado en la guerra desaparecieran de la escena? No sólo las mujeres, también los demócratas, los laicos, los intelec- tuales, los francófonos, los urba- nitas. En mi libro Carta de una mujer indignada digo que yo co- leccionaba todas las taras de Ar- gelia: burguesa francófona, urba- na, feminista, demócrata, laica. Todas estas gentes fueron borra- das poco a poco como si no hubie- ran existido nunca. Pero en tan poco tiempo... Cincuenta años no es tan poco tiempo. La lucha no ha termina- do. El primer movimiento nacio- nalista argelino era republicano, quería la libertad, la democracia y estaba acompañado de tenden- cias, muy débiles al principio, de identidad y religiosas. Las muje- res, sobre todo las militantes, que se comprometieron con la guerra no fue porque fueran musulma- nas sino porque querían la inde- pendencia para ir hacia la liber- tad. La guerra duró tanto que hu- bo conflictos internos para la to- ma de poder después de la inde- pendencia. En 1962 fue el ejérci- to quien ganó sobre los civiles. Poco a poco se instaló una socie- dad musulmana, un patriarcado muy reforzado sobre la autori- dad de los viejos; fue la estructu- ra de la tribu y el clan la que pre- valeció. Durante la guerra, a pe- sar del discurso oficial, impedían que las mujeres tomaran parte en ella. Hay que distinguir las que fueron reclutadas para ejercer su papel tradicional (hacer el cus- cús, lavar la ropa) y las que fue- ron reclutadas para otros pape- les, como poner bombas. Estas mujeres que fueron reclutadas masivamente al principio de la guerra pero después fueron re- chazadas. Siguieron aceptando mujeres de la montaña para lavar- les la ropa y demás pero ya no querían militantes. La Wilaya III, la Cabilia, tomó la decisión, en 1957, de no aceptar mujeres aunque estuvieran en peligro por- que eran perseguidas por la poli- cía francesa. Eran jóvenes que te- nían un nivel educativo superior al de los hombres y tenían cos- tumbres occidentales. Al princi- pio las reclutaron porque vestían falda, porque se parecían a las oc- cidentales y les eran útiles en la lucha, pero luego no querían lle- varlas al maquis. Tampoco acep- taron a hombres que tenían estu- dios. Siempre ha habido en Arge- lia una constante de miedo a los intelectuales porque ponían en peligro la sociedad primaria. ¿Por qué se enfada cuando le dicen que no parece argelina? Porque los que me dicen en Arge- lia que no soy una argelina son los más reaccionarios. En 1962, y esa es mi utopía, todas las argeli- nas íbamos hacia el mismo desti- no. Es como empiezo mi libro Dis- curso de una mujer indignada. Cuando decía en 1962 que era una mujer argelina nadie se extra- ñaba. Era evidente que no era co- mo las otras, pero era portadora de un proyecto colectivo. Cuan- do las madres se vestían así [señala la portada de su libro, en la que dos mujeres visten velo tradicional] y llevaban a sus hijas a la escuela, lo hacían con la idea de que se parecieran a mí, no a ellas mismas. Ahora, cuando me lo dicen es porque rechazan com- prender que tengo mi propia his- toria. Es una forma de racismo creer que una élite intelectual no puede existir en un país como Ar- gelia. Cuando las feministas lu- charon contra la Iglesia católica no les dijeron que no eran espa- ñolas. Los occidentales olvidan que los derechos humanos se han conseguido en contra de la cultura occidental. Cuando me in- vitaban a debates sobre el diálogo cultural yo siempre decía: ‘¿Con quién quieren dialogar, conmigo o con mi cultura? Porque yo estoy en contra de mi cultura’. ¿Qué logros han conseguido las mujeres en Argelia? Para muchas mujeres es Dios quien pide que sean dominadas. Antes teníamos el patriarcado primario, ahora un patriarcado religioso y es muy difícil luchar contra Dios. El poder se aprove- cha porque no tiene valor de ha- cer como Burguiba en Túnez. El presidente Buteflika dijo que po- día cambiar la ley de hidrocarbu- ros pero no la de la familia, por- que la familia es la base del poder autoritario en Argelia.c GRECIA wEl partido conserva- dor Nueva Democracia, que se presenta como garante de la permanencia de Grecia en el euro, ha superado en los últimos sondeos para las elec- ciones del 17 de junio a la coalición de izquierda radical Syriza. Cinco encuestas publi- cadas ayer dan una ventaja de entre 0,5 y 5,7 para Nueva Democracia, aunque los ana- listas coinciden en que los datos son demasiado ajusta- dos para predecir una victo- ria. / Reuters EXCLUSIVIDAD “Es racismo creer que una élite intelectual no puede existir en un país como Argelia” Tamzali lamenta no hablar la lengua de sus padres, árabe y castellano Losconservadores griegoslideranlos sondeoselectorales PRESIDENTE BUTEFLIKA “Dijo que podía cambiar la ley de hidrocarburos pero no la de la familia” DAVID AIROB Másde 60muertos enunataque contraAlQaeda ENTREVISTA Wassyla Tamzali, feminista y escritora argelina PANORAMA “Esmuy difícil lucharcontraDios”