8 ada ocurre por casuali- dad. Durante el viaje en el que estoy preparan- do este artículo, tengo la ocasión de encontrarme con la película “El cisne negro”. Narra la historia de una bailarina que bus- ca la perfección en el papel de su vida. Y para ello tiene que cambiar, adaptarse y romper con determina- dos hábitos que, paradójicamente, la habían llevado a disponer de esa gran oportunidad. Este año 2012 es un año de cam- bio. La supervivencia darwinista en clave de adaptación se impone aho- ra en las organizaciones. El 58,5% de las fundaciones cuenta con sub- venciones públicas, siendo el recur- so a esta fuente más frecuente entre las fundaciones creadas entre 1995 y 2002, entre las de tamaño media- no y grande, y entre las dedicadas a la cultura1. Para mejorar la estabi- lidad de este grupo de fundaciones, puede ser conveniente, sobre todo si tenemos en cuenta la actual coyun- tura de recortes en el gasto público SDUD UHGXFLU ORV GpÀFLW SUHVXSXHV- tarios, que en el futuro se orienten hacia una menor dependencia de IXHQWHVGHÀQDQFLDFLyQS~EOLFD ¢<ODVSHUVRQDV"¢&yPRDIHFWD esta situación al compromiso de los profesionales, voluntarios y contra- WDGRV" ¢(V XQ PRPHQWR GXUR SDUD ODPRWLYDFLyQ"¢'HTXpIRUPDQRV UHLQYHQWDPRVHVWDYH]" Evidentemente, se ha endure- cido el mercado de trabajo. Y esto DIHFWD WDPELpQ D ODV IXQGDFLRQHV La presión laboral en el puesto de trabajo incrementa cuando lo hace el desempleo. Los salarios bajan, o QRVXEHQFRPRHQRWUDVpSRFDV< HVWRDIHFWDDODOtQHDGHÁRWDFLyQGH la motivación: seguridad y necesi- dades básicas. Es en estos momen- tos –debo reconocer que, en mi opi- nión, de manera paradójica– cuando la inversión en formación según mi experiencia, se convierte en una de las primeras partidas que se reduce. (QGHÀQLWLYDVHHVWUHFKDQORVPiU- genes clásicos de motivación. Al igual que la bailarina que ha de hacer de cisne blanco y de cisne QHJURHOSULPHURVLQGLÀFXOWDGFRQ recursos entrenados, habituales, clá- sicos, nos encontramos con el reto de representar al segundo cisne des- de un enfoque diferente, atrevido, disruptivo2. No puedo apuntar aquí solucio- nes para la vertiente económica, contractual o de negociación co- lectiva. De ello se encargan -tienen el encargo... nuestros gobernantes, pasados, presentes y los que tengan que venir. Honestamente, les deseo p[LWR\DFLHUWR Sí me permito, sin embargo, sugerir tres líneas de trabajo que sirvan para mejorar las entidades creando un estilo de trabajo propio para nuestras actividades fundacio- nales tan conectadas con la socie- dad, hoy global y en continuo cam- bio. El resultado esperado: motivar y desarrollar nuestros equipos. La cultura de trabajo que propon- go se puede esbozar principalmente en tres aspectos: modelo organizati- vo, procesos y, sobre todo, personas. Carlos Cortés N 1 Rey M, Álvarez, L: El sector fundacional español. Datos básicos. AEF. 2011. 2 El liderazgo como impulsor del cambio. Carlos Cortés. Cuadernos de la Asociación Española de Fundaciones, n. 20, Madrid, julio 2010. 3 La necesidad de coherencia en el diseño de la organización. Henry Mintzberg. Harvard Deusto Business Review, 1982. El cisne negro Orientación al cambio de las fundaciones españolas La cultura de trabajo que propongo se puede esbozar principalmente en tres aspectos: modelo organizativo, procesos y, sobre todo, personas